Nacida y criada en las colinas de Langhe, el vino es el único amor verdadero de Sandra Vezza. En el transcurso de esta duradera y apasionada historia de amor, se sintió atraída por Barolo para tener su propia bodega. Fue aquí donde aprendió a comprender las cualidades únicas y maravillosas que imparte este pedazo de tierra.
Cada botella de L'Astemia Pentita resume varios momentos en el tiempo: las lluvias, la energía de los días cálidos, el frescor de la primavera, el silencio de los largos inviernos y, lo más importante, el trabajo de las personas que cuidan la viña y sus secretos.
Donde los elementos inmutables se encuentran con el flujo constante de la naturaleza y la humanidad, nace L'Astemia Pentita. Esta alquimia surge en parte de la propia Sandra Vezza, impulsada por su lema "dinámica incluso cuando está parada", un mantra que la guía a través de los mundos de arte y negocio, hoy plasmados en su vino.